Volviendo a las raíces judías
El cristianismo no podría existir y no existiría si no fuera por el pueblo judío, pero a pesar de ello para los antisemitas ha sido esencial separar a Jesús de sus raíces judías. Desde los tiempos de Roma se ha desjudaizado a Jesucristo, para que el odio sea bien visto y el antisemitismo se convierta en una virtud cristiana y por supuesto en la “voluntad de Dios”, y en muchas ocasiones en una ideología política. A pesar de sus profundas raíces hebreas el mundo a lo largo de la historia ha mirado con frecuencia e insistencia a Roma y rara vez a Jerusalén. Es menester mencionar que Jesucristo (Yeshua en hebreo), como sucede en los países semíticos pertenecía a una tribu, las 12 tribus de Israel, y una de ellas era Judá, relacionada con el rey David. Jesús al igual que los patriarcas nació en circunstancias milagrosas, ya que María era una mujer virgen. Es necesario recordar que los patriarcas del pueblo judío nacieron de mujeres quienes por diversas circunstancias no podían dar v